A Marta Rovira le traicionó el otro día el subconsciente. Cuando dijo que el Estado quería muertos. Yo creo que los que querían muertos eran ellos. Era la única manera de salvar el proceso. Poder ir a Bruselas y decir: veis lo malos que son estos españoles.
Pero me temo que, incluso en este caso, no hubiera pasado nada. Los ingleses tuvieron treinta soldados en Irlanda del Norte y nadie movió un dedo. Es que ni la República de Irlanda. Sin olvidar que han suspendido la autonomía del Ulster cinco veces. Cinco. Los catalanes llevamos una. Espero que no se vuelva a repetir.
Pero estuvieron alentando a la gente hasta el final. Con el votarem, votarem o el votarem per ser lliures. TV3 no se perdía un acto. La manifestación delante de Economía y Finanzas. O la de los estudiantes. O la Marató per la Democracia del domingo anterior al referéndum.
Desde luego, también los porrazos de aquel día. El parón de país. La huelga generla del día ocho. Los cortes del AVE. A cualquiera le ponían un micrófono en directo a ver quién la decía más gorda.
Una quería la independencia porque su abuelo, que sobrevivió a la batalla del Ebro, se lo había hecho jurar en el lecho de muerte. Otro porque sus hijos, en la pérfida España actual, están condenados a la miseria. La de más allá para echa a las fuerzas de ocupación.
Si no hubo muertos fuer un milagro. La única opción del proceso era el choque de trenes. A pesar de que, a la vista de como el país ha asumido el 155 -no ha dimitido ningún alto cargo-, Catalunya no era un AVE, ni siquiera un tren de Cercanías. Tampoco un tranvía.
Pero no se porqué tantos aspavientos con las declaraciones de Marta Rovira. La prueba de que son falsas es que no pararon. Al contrario proclamaron la República catalana de ocho segundos. Luego abieron un período de negociación -con el Colegio de Abogados de Barcelona, todo hay que decirlo porque no se apuntó nadie más- a ver si sonaba la flauta y se evitaban eventuales responsabilidades penales.
Lo que no sé es porque declaras la independencia y luego van todos los consejeros -excepto los fugados a Bruselas- como corderitos a declarar la Audiencia Nacional. Para eso haber convocado elecciones anticipadas y te ahorras el estropicio institucional, político, social, económico -véase la EMA- y social al que nos han llevado.